06 julio 2024

Un cuento de COPILOT

 ¡Claro! Aquí tienes un cuento de 500 palabras inspirado en los textos que me has proporcionado:

Un cuento. Había una vez un reino que tenía un rey, éste, como se aburría bastante, aprendió a hacer pasteles, y pasteles y más pasteles


Había una vez un reino muy lejano donde vivía un rey llamado Alfonso. Alfonso era un rey bondadoso y querido por todos sus súbditos, pero tenía un pequeño problema: se aburría mucho. A pesar de tener todas las riquezas y comodidades, Alfonso sentía que algo faltaba en su vida.

Un día, mientras paseaba por los jardines del palacio, Alfonso decidió que quería aprender algo nuevo. Después de mucho pensar, se le ocurrió una idea brillante: ¡aprendería a hacer pasteles! Sin perder tiempo, llamó a los mejores pasteleros del reino y comenzó a tomar clases.

Alfonso se dedicó con pasión a su nuevo hobby. Pasaba horas en la cocina, mezclando ingredientes, horneando y decorando pasteles. Pronto, se convirtió en un experto pastelero y sus creaciones eran tan deliciosas que todos en el palacio las elogiaban.

Sin embargo, Alfonso no quería guardar sus pasteles solo para él y su corte. Quería compartir su alegría con los más pequeños del reino. Así que decidió que cada día invitaría a una clase de niños de primero de infantil al palacio para que disfrutaran de sus pasteles.

Los niños llegaban al palacio con ojos brillantes y sonrisas enormes. Se sentaban alrededor de una gran mesa y esperaban ansiosos a que el rey Alfonso les sirviera sus deliciosos pasteles. Había pasteles de chocolate, de fresa, de vainilla, y muchos más. Los niños comían con gusto y siempre pedían más.

En ese reino, todos eran felices. Los niños esperaban con ansias el día en que les tocaba visitar el palacio, y los padres estaban agradecidos de ver a sus hijos tan contentos. Sin embargo, había un pequeño inconveniente: todos en el reino empezaron a ponerse un poco rellenitos.

El rey Alfonso no se dio cuenta de esto al principio, pero un día, mientras paseaba por el mercado, notó que muchos de sus súbditos parecían un poco más redondeados de lo habitual. Preocupado, decidió hablar con su consejero real, el sabio Bernardo.

—Bernardo, he notado que muchos de mis súbditos están ganando peso. ¿Crees que mis pasteles tienen algo que ver con esto? —preguntó Alfonso.

Bernardo, que siempre decía la verdad, respondió con sinceridad:

—Mi rey, tus pasteles son deliciosos, pero quizás deberíamos encontrar un equilibrio. Podrías seguir haciendo pasteles, pero también podríamos promover actividades saludables para los niños y sus familias.

Alfonso pensó que era una excelente idea. Así que, además de seguir invitando a los niños al palacio para disfrutar de sus pasteles, organizó actividades al aire libre como juegos, carreras y bailes. Los niños seguían disfrutando de los pasteles, pero también se mantenían activos y saludables.

Con el tiempo, el reino se convirtió en un lugar aún más feliz. Los niños no solo disfrutaban de los deliciosos pasteles del rey, sino que también se divertían jugando y haciendo ejercicio. Alfonso estaba contento de ver a sus súbditos sanos y felices, y nunca más se sintió aburrido.

Y así, en el reino de Alfonso, todos vivieron felices y contentos, disfrutando de los dulces placeres de la vida con moderación y alegría.


Espero que te haya gustado el cuento. ¿Hay algo más en lo que pueda ayudarte?

. No, gracias COPILOT

Flores

Spring

05 julio 2024

Spring/Primavera

 PRIMAVERA

Encerrados por los hielos del invierno los huesos de los frutos, las semillas, las raíces, ¿quién hará que la savia ascienda para que vuelvan los retoños a brotar? Tiernos renuevos de verdor, hojas todo, briznas, vainas: habla de la vida oculta que surge bajo tierra, vida enterrada que la Muerte cuida.

Sopla suavemente el viento del deshielo, cae lenta la lluvia, destellos lanza el sol al despertarse, brota tierna la hierba en la llanura; las nuevas hojas engalanan los setos; los huesos de los frutos, las semillas, las raíces, gracias a la savia retoñan, germinan; brotan en las sendas los helechos rizados; se aparean los pájaros y vuelven a cantar.

No hay estación como la primavera cuando en todas las cosas está viva la vida, antes de que canten los nuevos pajarillos y las hendidas golondrinas se retiren veloces por caminos sin sendas-, Dios guía su vuelo y prepara su mesa para que nada les falte-, antes de que una flor más sean las margaritas, antes de que tenga fuerza el sol de abrasar el mundo al mediodía.

No hay estación como la primavera que tan pronto se va; no hay vida como la vida efímera que nace en primavera: el césped reverdece, se viste la desnuda tierra, hay vida en el nido, pluma sobre rama agitada, poderoso vuelo: no hay estación como la primavera, tan efímera, recién nacida ahora y ya apresurándose a morir.

CHRISTINA ROSSETTI. Spring/primavera. Traductor: ÁNGEL RUPÉREZ

Primavera. Spring

 Spring

04 julio 2024

Spring/Primavera

Spring

Spring

 Spring

Spring

Frost-locked all the winter,
What shall make their sap ascend
That they may put forth shoots?
Tips of tender green,
Leaf, or blade, or sheath;
Telling of the hidden life
That breaks forth underneath,
Life nursed in its grave by Death.
Seeds, and roots, and stones of fruits,

Blows the thaw-wind pleasantly,
Drips the soaking rain,
By fits looks down the waking sun:
Young grass springs on the plain;
Young leaves clothe early hedgerow trees;
Seeds, and roots, and stones of fruits,
Swollen with sap, put forth their shoots;
Curled-headed ferns sprout in the lane;
Birds sing and pair again.

There is no time like Spring,
When life's alive in everything,
Before new nestlings sing,
Before cleft swallows speed their journey back
Along the trackless track,--
God guides their wing,
He spreads their table that they nothing lack,--
Before the daisy grows a common flower,
Before the sun has power
To scorch the world up in his noontide hour.

There is no time like Spring,
Like Spring that passes by;
There is no life like Spring-life born to die,--
Piercing the sod,
Clothing the uncouth clod,
Hatched in the nest,
Fledged on the windy bough,
Strong on the wing:
There is no time like Spring that passes by,
Now newly born, and now
Hastening to die.

Christina Rossetti

Christina Georgina Rossetti (5 de diciembre de 1830 - 29 de diciembre de 1894) fue una escritora inglesa de poemas románticos, devocionales e infantiles, incluyendo “Goblin Market” y “Remember”. También escribió las letras de dos villancicos muy conocidos en Gran Bretaña: “In the Bleak Midwinter” y "Love Came Down at Christmas"1.

Nació en Londres, Inglaterra, hija de Gabriele Rossetti, un poeta y exiliado político de Vasto, Abruzzo, Italia, y Frances Polidori, la hermana del amigo y médico de Lord Byron, John William Polidori1. Tenía dos hermanos y una hermana: Dante Gabriel se convirtió en un influyente artista y poeta, y William Michael y Maria se convirtieron en escritores1. Christina, la más joven, dictó su primera historia a su madre antes de aprender a escribir1.

Rossetti fue educada en casa por su madre y su padre a través de obras religiosas, clásicos, cuentos de hadas y novelas. Se deleitaba con las obras de Keats, Scott, Ann Radcliffe y Matthew Lewis1. La influencia de la obra de Dante Alighieri, Petrarca y otros escritores italianos llenó el hogar e influyó en la escritura posterior de Rossetti1.

En la década de 1840, la familia Rossetti enfrentó problemas financieros debido a un deterioro en la salud física y mental de su padre1. En 1843, fue diagnosticado con bronquitis persistente, posiblemente tuberculosis, y enfrentó la pérdida de la vista1. Rossetti’s mother comenzó a enseñar para apoyar a la familia, y Maria se convirtió en una institutriz residente, una perspectiva que Christina Rossetti temía1.

En 1862, Christina publicó “Goblin Market and Other Poems” y en 1866 “The Prince’s Progress and Other Poems”, ambas con frontispicio y decoraciones de su hermano Dante Gabriel2. Estas dos colecciones, que contienen la mayor parte de su mejor trabajo, la establecieron entre los poetas de su día2.

En 1871, Christina fue afectada por la enfermedad de Graves, un trastorno de la tiroides que desfiguró su apariencia y puso su vida en peligro2. Aceptó su aflicción con valentía y resignación, sostenida por la fe religiosa, y continuó publicando, emitiendo una colección de poemas en 1875 y “A Pageant and Other Poems” en 18812.

Proporcionado por COPILOT


¡A volar!