30 octubre 2009

Ser adivino en 1865

El año sesenta y cinco

y ochocientos sobre mil

soplarán vientos de marzo

antes de llegar abril.

Pasado ya el mes de agosto,

pero antes de san Andrés

de las viñas saldrá el mosto

para ser vino después.

Y habrá brevas y melones

de superior calidad,

y se comerán capones

por fiestas de Navidad.

Venderán pan los horneros,

miriñaques las modistas,

dentaduras los dentistas

y dulces los confiteros.

De esparto se harán esteras,

y aunque muchas penas pasen,

todas las que no se casen

permanecerán solteras.

En el Almanaque de la Risa de 1 de enero de 1865

Un gato junto al estanque del Retiro

Un paseo madrileño
Un paseo madrileño
Un paseo madrileño
Un paseo madrileño

Enriketa ve un fantasma