12 febrero 2008

Extraños sucesos o, mejor, SIN COMENTARIOS

En el número 9 del Diario curioso, histórico, erudito, comercial, civil y económico del lunes 15 de junio de 1772 se lee:

Suceso del día: A 15 de junio de 1726. Víspera de la Santísima Trinidad, se vio a las diez de la noche en la Villa, y Corte de Madrid un Arco Iris, con todos sus colores, hermosísimo, que nacía como de Portugal, y remataba su punta en el palacio de Rey Católico Don Felipe Quinto en Madrid. Hallábase en esta ocasión la reina Doña Isabel Farnesio recién parida de una Niña, que seis días antes había dado a luz; y sin duda fue anuncio esta señal prodigiosa de las Bodas que al año siguiente se ajustaron entre el Príncipe de España, y una Infanta de Castilla, hermana suya, con el príncipe del Brasil, que casó con la Infanta de Castilla, y una Infanta de Portugal, que casó con el Príncipe de Asturias Don Fernando de Borbón, legítimo sucesor de la Corona de España; para cuyas Bodas; descogió el Cielo aquel misterioso arco que enlazaba las dos Familias Reales con tan estrechos lazos.
Barcelona: por Carlos Casas, impresor y de Juan Centene, librero


Del diario curioso, histórico, erudito, comercial, civil y económico que con el número 9 fue sacado a la venta el 15 de junio de 1772, escrito por Don Pedro Ángel de Tarazona vecino de Barcelona con privilegio real para poder publicar estas revistas.

Tomado del fondo de la Hemeroteca digital de la Biblioteca Digital Hispánica

11 febrero 2008

Irlanda: Kylemore Abbey

Kylemore Abbey Church



Kylemore Abbey

Kylemore Abbey es un edificio neogótico que, actualmente es un exclusivo internado femenino, regentado por monjas benedictinas, situado en las orillas del lago Kylemore. Lo mandó construir Mitchell Henry como regalo para su esposa, la cual murió repentinamente poco tiempo después. A ésta la siguió su hija, con lo cual el pobre Henry vendió el castillo.

07 febrero 2008

Acacias espinosas en la vega de Aranjuez

acacias espinosas en la vega de aranjuez


troncos de acacias espinosas

de los Cármina Burana

(WIKI) En estos poemas se hace gala del gozo por vivir y del interés por los placeres terrenales, por el amor carnal y por el goce de la naturaleza, y con su crítica satírica a los estamentos sociales y eclesiásticos, nos dan una visión contrapuesta a la que se desarrolló en los siglos XVIII y segunda parte del XIX acerca de la Edad Media como una “época oscura”.
En los Cármina burana se satirizaba y se criticaba toda la sociedad en general, especialmente a las personas que ostentaban el poder en la corona y sobre todo en el clero. Las composiciones más características son las Kontrafakturen que imitan con su ritmo las letanías del Antiguo Evangelio para satirizar la decadencia de la curia romana, o para construir elogios al amor, al juego o, sobre todo, al vino, en la tradición de los cármina potoria.
La colección se encuentra dividida en 6 partes:
Carmina ecclesiástica (canciones sobre temas religiosos)
Carmina moralia et satírica (cantos morales y satíricos)
Carmina amatoria (canciones de amor)
Carmina potoria (contiene obras sobre la bebida, y también parodias)
Ludi (representaciones religiosas)
Supplemantum (versiones de todas las anteriores, con algunas variaciones)

La obra musical moderna
Carl Orff tomó los textos de Carmina burana para componer una cantata escénica con el mismo nombre en 1937, cuyo fragmento más conocido es el O Fortuna, que constituye la primera parte del preludio y que se repite al final de la obra. Orff subtituló la composición: Cantiones profánae cantóribus et choris cantándae comitántibus instrumentis atqüe imáginibus mágicis (en latín: ‘canciones laicas para cantantes y coreutas para ser cantadas junto a instrumentos e imágenes mágicas’).
La versión de Orff forma parte de una trilogía junto a Catulli Cármina y Trionfo di Afrodita. En la cantata, además de la orquesta y coros, intervienen solistas (
soprano, tenor, bajo), destacando su abundante y espléndida percusión.
De la colección completa de los Carmina burana, Orff escogió 25 canciones y las ordenó de modo que pudieran ser representadas en un escenario. En cuanto a la música, se amoldó a la sencillez de los textos. Aproximadamente la mitad de las piezas son canciones cuya melodía se repite en cada estrofa casi sin variantes, limitándose algunas veces a realizar simples escalas mayores o menores.
El ritmo es el encargado de dar variedad al conjunto, impidiendo así cualquier monotonía. Esta riqueza rítmica es, tal vez, la característica más importante de los Carmina burana de Orff.
La obra de Orff consta de una introducción, tres partes y un final.
Introducción: Fortuna imperatrix mundi.
Primera parte: Primo vere - Ûf dem anger.
Segunda parte: In taberna.
Tercera parte: Cours d’amour - Blanziflour et Helena.
Final: Fortuna imperatrix mundi.
I.- FORTUNA IMPERATRIX MUNDI
1. O Fortuna
O Fortuna
velut luna
statu variabilis,
semper crescis
aut decrescis;
vita detestabilis
nunc obdurat
et tunc curat
ludo mentis aciem
egestatem,
potestatem
dissolvit ut glaciem.

Sors immanis
et inanis,
rota tu volubilis,
status malus,
vana salus
semper dissolubilis,
obumbrata
et velata
michi quoque niteris;
nunc per ludum
dorsum nudum
fero tui sceleris.

Sors salutis
et virtutis
michi nunc contraria,
est affectus
et deffectus
semper in angaria.
Hac in hora
sine mora
corde pulsum tangite;
quod per sortem
sternit fortem,
mecum omnes plangite!

1. Oh Fortuna
Oh Fortuna,
variable como la Luna
como ella creces sin cesar
o desapareces.
¡Vida detestable!
Un día, jugando,
entristeces a los débiles sentidos,
para llenarles de satisfacción
al día siguiente.
La pobreza y el poder
se derriten como el hielo.
ante tu presencia.

Destino monstruoso
y vacío,
una rueda girando es lo que eres,
si está mal colocada
la salud es vana,
siempre puede ser disuelta,
eclipsada
y velada;
me atormentas también
en la mesa de juego;
mi desnudez regresa
me la trajo tu maldad.

El destino de la salud
y de la virtud
está en contra mía,
es atacado
y destruido
siempre en tu servicio.
En esta hora
sin demora
toquen las cuerdas del corazón;
el destino
derrumba al hombre fuerte
que llora conmigo por tu villanía.

¡A volar!