
Pagó los dos peniques y medio a la camarera desaliñada y salió de la fonda, reanudando su errar. Entró por la Calle Capel y caminó hacia el Ayuntamiento. Luego, dobló por la Calle Dame. En la esquina de la Calle George se encontró con dos amigos y se detuvo a conversar con ellos. Se alegró de poder descansar de la caminata. Sus amigos le preguntaron si había visto a Corley y que cuál era la última. Replicó que se había pasado el día con Corley. Sus amigos hablaban poco. Miraron estólidos a algunos tipos en el gentío y a veces hicieron un comentario crítico. Uno de ellos dijo que había visto a Mac una hora atrás en la Calle Westmoreland. A esto Lenehan dijo que había estado con Mac la noche antes en Egan's. El joven que había estado con Mac en la Calle Westmoreland preguntó si era verdad que Mac había ganado una apuesta en un partido de billar. Lenehan no sabía: dijo que Holohan los había convidado a los dos a unos tragos en Egan's.
De “Dos galanes” en los Cuentos de James Joyce