con nuevos riscos de cuajada nieve,
y en vano el Aquilón sus alas mueve,
derribando cortijos y cabañas,
que el fuego que yo traigo en mis entrañas
bastará a derretirla en tiempo breve,
y si a luchar con él mi fe se atreve,
no será la mayor de sus hazañas.
Y si un hombre triunfó de su violencia,
pasando por los Alpes las banderas,
que llevaron a Italia muerte y luto,
no hallarán las que sigo resistencia;
que son de un Dios que abarca las esferas,
terrible, vengativo y absoluto.
Lupercio Leonardo de Argensola (Barbastro, Huesca, 14 de diciembre de 1559 - Nápoles, 2 de marzo de 1613)
Lupercio Leonardo de Argensola fue un poeta, historiador y dramaturgo español nacido en Barbastro, Huesca el 14 de diciembre de 1559 y fallecido en Nápoles el 2 de marzo de 1613. Es conocido por su obra poética de corte clasicista y por ser uno de los iniciadores del teatro clásico español, adscribiéndose a la escuela renacentista de fines del siglo XVI con sus dos tragedias conservadas Isabela y Alejandra escritas en su juventud. Lupercio Leonardo de Argensola fue bautizado en la iglesia parroquial de Barbastro y fue el mayor de cuatro hijos de Juan Leonardo y Aldonza Tudela de Argensola.